Tú tan cambiante y yo tan estática,
colgada de tu mirada, mientras tú danzas entre el aire de otras faldas.
Juro que no te quiero cerca porque dilatas mi herida pero joder,
a la vez te acercas y me curas, dándome mil vidas para inmunizar cualquiera aflicción.
Y cuando pienso que no lo puedo hacer peor, me vuelvo a dejar enredar por ti.
Venus y Marte, by Antonio Cánova (Museo Del Prado)
No hay comentarios:
Publicar un comentario